Cuando se habla de Juan Gabriel y Luis Miguel solo se puede pensar en grandeza y música mexicana, pero lo que pocos saben es que hay una historia que los une, ya que se dice que el Divo de Juárez le regaló una canción a un pequeño Luismi que estaba comenzando su carrera arriba de los escenarios.
Así como lo leyeron, cuando Luis Miguel era pequeño, para ser exacto en 1982, Juan Gabriel, quien ya tenía una larga carrera en el medio le regaló una canción a la futura estrella de México, quien terminaría por elegir a otro compositor como el principal, no despreció la letra de Juanga, ya que terminó cantando el regalo del Divo de Juárez.
Se dice que para el álbum de debut de Micky, 1+1=2 enamorados, Juan Gabriel le obsequió uno de los temas principales a un niño que tenía un gran talento, tanto que con el paso de los años terminaría convirtiéndose en una estrella mundial, pero su compositor de cabecera terminaría siendo Juan Carlos Calderón.
La canción
«Mentira» es el tema que e Juanga decidió obsequiarle a un niño de 12 años que espera convertirse en una de las más grandes estrellas de la música mexicana. Por lo que a pesar de no considerarlo como su compositor de cabecera, Luis Miguel puede decir que fue uno de los artistas que interpretó una de sus canciones, pero también uno de los pocos que recibió un regalo tan valioso.
A pesar de no formar parte de su carrera por mucho tiempo, el Divo de Juárez formó parte importante del lanzamiento de la carrera del «Sol de México», ya que la canción que le regaló formó parte de los grandes hits de su primer álbum, mismo que le ayudó a crecer dentro de los escenarios del país.
Después de ese momento su relación no fue tan buena, aunque en alguna ocasión el cantautor mexicano confesó que admira más a Luismi que a la misma Rocío Dúrcal, quien llegó a interpretar en diversas ocasiones las canciones de Juan Gabriel.
El adiós
Cuando se reveló la trágica noticia de la muerte de Juanga, Luis Miguel no podía no despedir a uno de los más grandes de todos los tiempos de México, por lo que mandó una corona de rosas blancas, pero no cualquier corona, ya que contaba con 500 flores y fue de las que estuvo presente en primera fila en el funeral. Esto quiere decir que fue uno de los detalles que más apreció la familia de Alberto Aguilera.
Con información de Heraldo de México
Más historias
¡Histórico! La Cocina Mexicana Conquista la Guía Michelin
Doblarte Hacia la Pobreza: El Misterio de los Billetes Doblados
¿Harvard o Stanford?